El Gobierno de Venezuela alertó sobre una guerra que, según afirmó, busca impulsar Estados Unidos en Latinoamérica y el Caribe. Sin embargo, remarcó que rendirse es un “imposible histórico”. La advertencia surge en medio de tensiones por el despliegue aeronaval estadounidense en el Caribe.
Denuncias por intimidación
Durante un acto militar, el ministro de Defensa, Vladimir Padrino López, denunció sobrevuelos de aviones F-18 cerca del golfo de Venezuela y habló de un intento de “intimidación”. Aseguró que el país está preparado para la defensa y que sigue “clamando por la paz”, aunque en “rebeldía” frente a la “acción nefasta” del “imperialismo norteamericano”.
Confiscación del buque Skipper
Padrino López calificó como “violación flagrante” al derecho internacional la incautación del buque petrolero Skipper por parte de Estados Unidos. Señaló que era un barco “petrolero, mercante, civil” que transportaba crudo venezolano “para otros mercados internacionales”. Washington sostiene que el buque navegaba con falsa bandera y tenía vínculos con contrabando de petróleo iraní.
Respuesta de Maduro
El presidente Nicolás Maduro advirtió que las “fórmulas de mentiras, de presión, de chantaje y amenazas” no funcionarán “jamás”. Añadió que Venezuela se mantiene en “permanente movilización” militar ante lo que considera una amenaza de invasión.