El presidente Rodrigo Paz posesionó este viernes al general Mirko Antonio Sokol como nuevo comandante general de la Policía Boliviana, en reemplazo de Augusto Russo. Junto a él también fueron designados el general Juan Peña Rojas como subcomandante y jefe del Estado Mayor, y el general Gunther Agudo como inspector general.
Tolerancia cero a la corrupción interna
En su mensaje a la institución, Sokol fue tajante: “No se arriesguen a perder su libertad, su profesión por unos cuantos centavos”. Ordenó que queda totalmente prohibido cobrar dinero a ciudadanos o entre camaradas. “Si su comandante general no va recibir ni un solo centavo, tampoco el último sargento lo va hacer”, advirtió.
Afirmó que nunca recibió dinero de un ciudadano ni de un funcionario policial y que su primera misión será recuperar la credibilidad institucional.
Compromiso con una Policía más humana
Sokol anunció cambios estructurales para lograr una institución “digna, moderna, más humana y más respetuosa del ser humano”. También implementará un sistema para que la población denuncie hechos de corrupción y pidió a la ciudadanía no fomentarla.
Mensaje a los delincuentes y apoyo político
Advirtió a organizaciones criminales, incluidas aquellas con integrantes extranjeros, que ya no habrá policías que los protejan. “A esos delincuentes les decimos que se vayan del país o que se atengan a las consecuencias”, afirmó.
Cerró señalando que presentará iniciativas legislativas para transformar la Policía, con apoyo del Ejecutivo y del Legislativo.