Un estudio del Observatorio de Género de la Coordinadora de la Mujer reveló que cinco candidatas bolivianas fueron blanco de acoso político durante la actual campaña electoral. Eva Copa, exaspirante a la presidencia, denunció “acoso político” y “hostigamiento interno” en su partido, lo que la llevó a abandonar su candidatura. Fue víctima de violencia digital con ataques a su vida íntima y llamados a agredirla.
Mensajes misóginos y amenazas públicas
Mariana Prado, candidata a la vicepresidencia por Alianza Popular, enfrentó acoso con mensajes clasistas, sexuales y misóginos. En el caso de Susana Bejarano, postulante al Senado por La Paz, se detectaron insultos y descalificaciones basadas en estereotipos de género. Incluso fue criticada por Evo Morales, quien la acusó de ser “infiltrada de la derecha”, a lo que Bejarano respondió: “Hay que ser muy machista para pensar que los hombres tutelan el pensamiento de las mujeres”.
Racismo, sexismo y renuncias
Toribia Lero y Karla Robledo también fueron agredidas con mensajes sexistas y racistas. Robledo renunció a su candidatura tras la presión.
El informe exige al Tribunal Electoral y al Ministerio Público garantizar los derechos políticos de las mujeres, libres de acoso y violencia.