En Lualaba, al sur de la República Democrática del Congo, al menos 32 mineros murieron tras el colapso de un puente clandestino construido con tablas sobre un foso lleno de agua de lluvia. El hecho ocurrió mientras decenas de trabajadores ilegales intentaban huir al escuchar disparos, presuntamente efectuados por guardias de seguridad que sorprendieron a los mineros irrumpiendo en una concesión privada en Mulondo.
La estructura no resistió el peso de la multitud
Según el ministro provincial de Interior, Roy Kaumba, el acceso estaba “estrictamente prohibido” por riesgo de derrumbes. Aun así, los mineros entraron durante la madrugada. “Se han recuperado 32 cuerpos sin vida”, señaló la autoridad. Las víctimas murieron por ahogamiento al caer en una trinchera perimetral excavada por la empresa china que explota el yacimiento. El paso improvisado cedió de forma súbita por el peso y el pánico colectivo.
Tensión entre mineros y fuerzas de seguridad
El incidente ha generado malestar entre grupos de mineros artesanales, que acusan a los guardias privados de actuar con fuerza excesiva. Las autoridades investigan si los disparos cumplieron los protocolos de seguridad. En la zona, la convivencia entre minería industrial y explotación artesanal es conflictiva y ha provocado numerosas tragedias.
Una región marcada por tragedias recurrentes
Organizaciones de derechos humanos denuncian que las barreras de seguridad y la pobreza extrema empujan a miles de personas a asumir riesgos mortales. Lualaba, epicentro mundial del cobalto, concentra los peores casos de mortalidad laboral. Las lluvias estacionales y los túneles precarios agravan los peligros para los trabajadores.
Búsqueda e investigación en curso
El Gobierno provincial mantiene cerrada la mina mientras equipos locales siguen buscando posibles cuerpos atrapados. También se anunció una investigación formal para establecer responsabilidades y reforzar las medidas de seguridad en la zona.