El capitán del Ejército en el exilio, Wismerck Enrique Martínez Medina, lanzó un pedido urgente a los “militares dignos” de Venezuela. En un video, exhortó a oficiales y funcionarios a abandonar los cuarteles y “no dejarse utilizar como carne de cañón”. Señaló que Nicolás Maduro, Diosdado Cabello y Vladimir Padrino López “tienen orden de captura y sus cabezas tienen un precio”.
Acusaciones sobre las elecciones y la cadena de mando
Martínez afirmó que Maduro “se robó las elecciones del 28J” y es un “prófugo de la justicia”, por lo que no debe ser reconocido como presidente ni como comandante en jefe. Pidió a los militares que “no teman ser tildados como desertores”, recordando que su deber es con la Constitución y no con “ningún narco dictador”.
Mensaje a toda la estructura militar
El capitán, exiliado desde 2002 tras enfrentar a Hugo Chávez, instó a soldados, suboficiales, oficiales y mandos superiores a abandonar unidades, pelotones y brigadas. También pidió a las REDI y ZODI que eviten ser usadas por el régimen. Aseguró que esta es “la última oportunidad de hacer lo correcto”, advirtiendo que mientras los militares arriesgan su vida, los altos mandos “estarán escondidos en un búnker”.
Un llamado final para evitar un “mal mayor”
Martínez insistió en que actuar ahora puede salvar vidas y reiteró que “no vale decir que estaban cumpliendo órdenes”. Solicitó que su mensaje llegue “hasta el último soldado” del país.