China anunció que prolongará durante un año la suspensión del arancel adicional del 24% sobre bienes importados desde Estados Unidos, aunque mantendrá un gravamen general del 10%. La medida, difundida por el Ministerio de Finanzas, responde al «consenso alcanzado» en las últimas consultas económicas entre ambos países.
El acuerdo entrará en vigor el 10 de noviembre, tras la reunión sostenida en Corea del Sur entre el presidente chino Xi Jinping y el mandatario estadounidense Donald Trump. En ese encuentro, ambos gobiernos acordaron extender la tregua comercial y avanzar en una reducción gradual de tarifas.
Estados Unidos también reducirá impuestos
De manera paralela, Washington confirmó que disminuirá del 20% al 10% los aranceles adicionales que aplica a productos chinos, también a partir del 10 de noviembre. Esto se enmarca en una estrategia para aliviar tensiones en un contexto de desaceleración económica global.
Impacto en productos agrícolas
China además anunció el levantamiento de gravámenes de hasta el 15% a la soja y otros bienes agrícolas estadounidenses. Este gesto busca favorecer el comercio agrícola, uno de los sectores más afectados durante el conflicto arancelario.
A pesar de estos avances, analistas advierten que la rivalidad económica entre ambas potencias continúa y podría intensificarse en otras áreas estratégicas.